miércoles, 16 de julio de 2008

Acto en el Monumento a los Españoles

Impulsora de la marcha, y al igual que lo ocurrido durante el acto en Rosario, Elisa Carrió evitó sumarse al corralito que la organización preparó para los dirigentes políticos. Junto con Enrique Olivera, Patricia Bullrich y Adrián Pérez y Alfonso Prat-Gay se sacó innumerables fotos, comió choripán y gaseosa, y se la vio feliz por estar junto a la que llamó su gente. "La libertad es un trabajo, si se deja de hacerlo se pierde", dijo.

Presente ayer en el Monumento de los Españoles, junto con varios dirigentes de la Coalición Cívica, Elisa Carrió le apuntó sobre todo al ex presidente Néstor Kirchner como el más perjudicado tras los actos del Gobierno y el campo. Afirmó que la manifestación de las entidades rurales marcó "una bisagra histórica". Y evaluó que el titular del PJ "perdió poder ayer".

"Fue de una contundencia brutal. Creo que el pueblo pide respeto, libertad. Hay que entenderlo en ese registro. Me parece que quien perdió poder ayer es Néstor Kirchner. Si la Presidenta se respalda en las instituciones ¿Qué es lo mejor que podría pasarle a la Presidenta? Que se abra, que se recueste en las instituciones", estimó Carrió.

Además, en declaraciones a radio Mitre, fue tajante con la evaluación del esquema de retenciones móviles, eje del conflicto, y del proyecto que respalda la resolución y hoy debe ser tratado por el Senado.

"Yo estoy acompañando al campo porque la ley me parece injusta y confiscatoria. También entiendo la grandeza y la limitación de los dirigentes. Yo en esto tengo cierta consideración para no magnificar palabras que si las dijera yo sí serían peligrosas. No es lo mismo que hable un ex presidente a que hable un chacarero", lanzó.

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